Los efectos del sol en la piel son acumulativos, o sea que sumamos los rayos solares que recibimos desde niños. A medida que pasa el tiempo, van apareciendo manchas provocadas por la exposición continua.
Para aclararlas se pueden utilizar cremas despigmentantes a base de distintos ácidos y vitamina C, pero también se pueden atenuar con peelings blanqueadores.
Lo más importante en este caso es tratar de evitar que aparezcan las manchas en la piel, esto se logra utilizando protectores solares con un factor mayor a 15, tanto en invierno como en verano.
Otro detalle importante es que cuando se está expuesto al sol se utilicen gorros o sombreros con 8 cm de ala, y respetar los horarios recomendados (hasta las 11 a la mañana y de las 16 en adelante a la tarde).
