Uno de los aspectos que más pueden despertar nuestra atención es el transporte que ocupamos para trasladarnos a nuestros lugares de trabajo o estudio. Inclusive, y para hacer diligencias cotidianas, también puede que no tengamos opciones rentables a nuestro tiempo, necesidad o bolsillo.
En algunos casos los automóviles no son accesibles para todos, o muy costosos de mantener. De esta forma, alternativas como los scooters o motocicletas resultan opciones que para algunos pueden funcionar.
Sin embargo, la tecnología también ha llegado a las bicicletas, convirtiéndolas en artículos irresistibles: ecológicas, con características eléctricas que ayudan al esfuerzo físico pero no lo eliminan por completo… ¡Y ahora además son plegables! ¿Quiere enterarse sobre lo mejor de las bicicletas eléctricas plegables? No se despegue de esta información que va a encantarle.
¿Por qué no una bicicleta convencional?
Ejercicio sin exceso
Quizá una bicicleta manual es demasiado esfuerzo físico como para trasladarse a lugares donde la presencia es importante, pero un patinete eléctrico genera sedentarismo. Por ello, este es un intermedio que ofrece un ejercicio moderado, que a final del día ayude a tener el cuerpo en movimiento, pero que no sea tan exhaustivo.
Si bien quizá los domingos adoremos salir en bici a recorrer algunos kilómetros, no todos los días podemos estar en un mood deportivo apto como para exigirse de esa manera. Razón por lo que las bicicletas eléctricas no eliminan la necesidad humana de pedalear, pero si la disminuye.
En algunos casos, incluso, tienen pilotos automáticos que reducen a más de la mitad la necesidad de que debamos mover los pies. Pero siempre será necesario al menos pedalear un poco, lo que le mantendrá con energía suficiente para comenzar un nuevo día.
La practicidad
Además de tener características eléctricas aptas para circular por la ciudad sin llegar empapado o empapada de sudor a todos lados, también poseen mecanismos que permiten que la estructura pueda doblarse.
Esto facilita poder movilizarse sin tener limitaciones acarreadas por su medio de transporte: Se acabó el no saber dónde estacionar la bicicleta, no contar con candados para sujetarla, y tenerse que ir en transporte público por no tener opciones para alojar su pequeño vehículo.
La posibilidad de plegar la bicicleta ahorra mucho espacio, por lo que con un tamaño de maleta podrá ubicarla fácilmente en la oficina, aunque sea un pequeño cubículo. También en la universidad, oficinas a las que vaya a realizar trámites, entre otros ¡No hay necesidad de dejarla afuera a la intemperie!
Guía de compra
Fíjese en estos detalles antes de adquirir su bicicleta eléctrica plegable ideal.
La forma de plegarse
No solamente deberá considerar la facilidad para plegarse, sino la dirección en la que la bicicleta pueda encogerse: En algunos casos con la rueda y el pedal se forma una pequeña base que sostiene la bicicleta en su versión portátil. Mientras que en otros casos queda totalmente encogida como un libro, teniendo que acostarla para dejarla reposando en algún lugar.
El peso
Si es pesada, su capacidad de ser transportada pierda utilidad, por lo que pesos mayores a los 20 kilogramos podrán ser más o menos útiles según la masa corporal de quien la compra.
El tamaño
Según el lugar donde vaya a ser guardada podrá ser indispensable el tamaño que posea cuando está totalmente plegada. Aspecto que no puede dejarse de evaluar, puesto que su practicidad podrá depender de ello en gran medida.
Las ruedas
Estos modelos incluyen ruedas más pequeñas que son aptas solo para la ciudad. No tienen fines montañeros, lo que será bueno de considerar antes de adquirir una. ¿La necesita solo para trasladarse en asfalto? ¡Perfecto entonces!
La batería
Mientras más distancia necesite recorrer de ida y vuelta, mayor duración de la batería necesitará si la función eléctrica es muy importante en su caso, para no agotarse de más.
Nos seguimos leyendo pronto para más información que ayude a su bienestar integral.